también escribo para que bailen los dedos
de las manos, de los pies, de los recuerdos
escribo para dejar que pase el viento
para que me esquive y siga soplando
escribo para hablar con el tiempo
de esto, de aquello
del menor de los silencios
para que me dé la razón
cuando pataleo por lo de siempre
y también escribo por el arte de las rimas,
las palabras torcidas y el aire de las consonantes
escribo para no quedarme en silencio
o quizás para hacerlo y seguir diciendo
esto, aquello.
nada.